Separados/as: nunca más
2007 Declaración
Introducción
Como denominación, la Iglesia de los Hermanos está poniendo el foco, con mucha seriedad y dentro de su énfasis en “estar juntos/as”, en dejarse transformar por el Espíritu de Dios. Una expresión de este objetivo se destaca en la pregunta de búsqueda profunda: “¿Cuáles son los anhelos de Dios para la Iglesia de los Hermanos?”
Después de mucha oración, estudio, investigación y deliberación, nuestro comité concluyó que una parte esencial de la respuesta a esa inquietud es estar SEPARADOS/AS NUNCA MÁS.
Lograremos esto movilizándonos deliberada e intencionalmente hacia convertirnos en mucho más intercultural que lo que somos actualmente. Nuestras razones para llegar a esta conclusión están basadas en la Biblia.
Comenzamos con la visión en Apocalipsis 7.9:
Después de esto miré, y he aquí una gran multitud, la cual nadie podía contar, de todas naciones y tribus y pueblos y lenguas, que estaban delante del trono y en la presencia del Cordero, vestidos de ropas blancas, y con palmas en las manos.
El texto continúa describiendo la experiencia de adoración profunda de los ángeles de Dios y de personas de diversos trasfondos.
Creemos que esta visión no es meramente una descripción de la iglesia de Dios al final de los tiempos, sino una revelación de la intención para la verdadera naturaleza de la iglesia de Dios en el aquí y el ahora.
En Hechos 2.9-11 se menciona una lista de quince (!) grupos étnicos o idiomáticos presentes en el “cumpleaños” pentecostal de la iglesia, cuando el Espíritu Santo vino sobre las personas de fe. Algunos/as escolásticos/as de la Biblia suponen que había más que eso, y dicen que la lista tenía la intención de representar a “todas las naciones bajo el cielo” (v.5.). La idea de que la iglesia debería ser étnicamente diversa se enfatiza ampliamente en muchos pasajes más del Nuevo Testamento. Entre dichos pasajes se encuentran los siguientes, aunque habrá otros/as:
- Mateo 22: El segundo gran mandamiento de Jesús: Ama a tu prójimo (además, ilustrado por una parábola de una persona de un trasfondo diferente, el samaritano);
- Mateo 28.19-20: El mandamiento de Jesús de hacer discípulos de todas las “ethna”; el significado principal de este término griego es “grupos étnicos”; “naciones” es el significado secundario;
- Hechos 10: Cuando Pedro resistió la naturaleza intercultural de la iglesia, el Espíritu Santo le envió una visión que lo movilizó hasta el alma, para redireccionarlo y prepararlo para la evangelización intercultural;
- Romanos 12: Los y las miembros de la iglesia de Cristo difieren enormemente, pero todos y todas son partes de un mismo cuerpo;
- I Corintios 12.12-27: Muchos/as miembros, transformados/as en un solo cuerpo;
- Gálatas 3.26-28: No hay judío ni griego, etc. Todos… sois uno en Cristo;
- Efesios 2.14-22: Ya no sois extranjeros/as ni advenedizos/as, sino conciudadanos/as;
- I Juan 4.7: Todos/as los/as hijos/as de Dios se aman unos/as a otros/as.
El ministerio de Jesús era para personas de muchos trasfondos diferentes. En sus enseñanzas, Él expresó el amor de Dios a todas las personas. La Biblia describe a la iglesia como intercultural (1) en su nacimiento, (2) a lo largo del Nuevo Testamento, y (3) que continúa así al final de los tiempos. Creemos que Dios ama y valora las numerosas iglesias monoculturales (mayoría de miembros de una sola cultura) fieles que existen en medio nuestro. Bajo el liderazgo del Espíritu Santo, las iglesias monoculturales han sido y pueden ser efectivas. También, creemos que hace mucho tiempo que Dios anhela, y aún lo hace, que la iglesia sea intercultural, eso es: culturas diferentes unidas en una misma “cultura de Cristo” (Colosenses 3.10-11), realizando la visión de Jesús de hacer “nuevas todas las cosas (Apocalipsis 21.5)”. Por ende, Jesús nos llama a estar SEPARADOS/AS NUNCA MÁS; al contrario, constituir un sólo cuerpo íntegro. Es nuestra petición que podamos estar todos y todas abiertos/as para apoyar este objetivo a largo plazo y comprometernos con pasos importantes hacia el logro de dicha meta.
Al estilo de las parábolas de Jesús, compartimos un resumen de esta historia de la India. Demuestra cómo nuestros caminos individuales de fe pueden limitar nuestra experiencia de Dios. Este resumen es demasiado breve para captar la belleza o el pleno impacto de esta historia, pero es adecuado para ilustrar el punto principal:
“Seis hombres ciegos, luego de mucho discutir sobre la naturaleza del elefante, decidieron que un encuentro real con un elefante sería la mejor manera de conocer y discernir la verdadera naturaleza del elefante.
- El primero en aproximarse, extendió el brazo y tocó su costado inmenso. Llegó a la conclusión: “El elefante es como un gran muro”.
- El segundo sintió la trompa del elefante y dijo: “El elefante es como una serpiente”.
- El tercero sintió el colmillo del elefante y dijo: “El elefante es como una lanza”.
- El cuarto, rodeó con sus brazos una de sus inmensas patas y concluyó: “El elefante es como el tronco de un árbol”.
- El quinto, sintió una de sus orejas y dijo: “El elefante es como un ventilador”.
- El sexto tomó en sus manos el rabo del elefante y dijo: “El elefante es como una soga”.
¿Cuál hombre tenía razón en su percepción del elefante? ¿Cuál lo experimentó mejor? Cada uno de los seis tuvo una percepción separada, pero sólo parcialmente correcta del elefante. Más adelante en la historia, cuando las seis percepciones y experiencias se combinaron, surgió una imagen más completa del elefante.
Esta historia ilustra que ninguno/a de nosotros/as posee el monopolio de la única y “correcta” percepción de Dios, desde nuestros caminos de fe. Sin embargo, estando atentos/as a la Palabra de Dios y al liderazgo del Espíritu Santo, sumado a la voluntad de compartir nuestros caminos de fe y nuestras experiencias de Dios con hermanos y hermanas de diferentes trasfondos culturales, cada uno/a de nosotros/as puede experimentar y ver a Dios, y su visión para nosotros/as, con mayor plenitud. Solo allí somos transformados/as para poder abrazar lo que este informe denomina una filosofía de “SEPARADOS/AS NUNCA MÁS”, que nos guía a esa experiencia más enriquecida y plena de Dios.
Existen otras razones por las cuales es imperativo que nos convirtamos en una denominación más intercultural. Entre las mismas se incluyen las siguientes, aunque habrá otras:
- La necesidad de extensión evangelística y servicio compasivo de mayor alcance.
- La realidad del giro demográfico nacional a una población pluriétnica.
- Para algunas iglesias, que de lo contrario podrían menguar o morir, el interculturalismo puede permitir la supervivencia, la renovación y el crecimiento al adecuarse a la demografía cambiante.
- El valor de abrazar la virtud espiritual de todos los grupos raciales y étnicos.
- El testimonio de muchos individuos en iglesias interculturales de que pertenecer como miembros de una iglesia tal es enriquecedor y transformador para su vida.
- La iglesia intercultural provee un modelo para la sanación de las divisiones étnicas y raciales en la sociedad al demostrar cómo comunicarnos y amarnos atravesando estas “fronteras”.
- El tiempo de transformación de la segregación dominical y la compartimentación del pueblo de Dios en la sociedad puede ser un tiempo en que, como cristianos /as, nos esforcemos por la reconciliación.
En su carta a la iglesia en Corinto, Pablo destacó como ejemplo de emulación a la iglesia de Macedonia. Además, tenemos ejemplos de otras denominaciones que han progresado sustancialmente hacia convertirse en iglesias más interculturales. Por ejemplo, nuestro comité se ha nutrido de la experiencia y de los modelos de avance hacia el ministerio intercultural de denominaciones como American Baptist Churches USA, Presbyterian Church (USA), Reformed Church of America y Mennonite Church USA.
El teólogo luterano Dr. H.S. Wilson, en su artículo sobre las iglesias multiculturales denominado: “A Bouquet of Multiple Flowers” (Un ramo de flores múltiples), sostiene que cuando las iglesias se sentían demasiado cómodas en una norma monocultural, significaba, al menos en parte, un deslizamiento que se alejaba de la norma preferida por Dios. En sus palabras: “Abrazar el multiculturalismo no es una opción para los/as cristianos/as, sino un mandato. Es un llamado a descartar una noción falsa de comunidad cristiana, a pesar de su legado atesorado por tanto tiempo”. ¿Cómo podemos abrazar la verdadera comunidad cristiana? Podemos abrazar la comunidad cristiana siguiendo el mandamiento de Jesús de amar a nuestros/as vecinos/as de trasfondos diversos: construyendo con ellos/as relaciones profundas y duraderas que deriven en la comunidad cristiana a la cual Jesús nos llama.
Avanzar hacia estar “Separados/as nunca más”
Como resultado de muchas conversaciones compartidas a lo largo de los tres años juntos/as, sentimos que existe una necesidad urgente de celebrar nuestra diversidad actual y construir sobre su base. Queda muy claro que, como denominación, acordamos en gran medida que a pesar de las diferencias en cómo adoramos y nos relacionamos con Dios, somos miembros de la familia de Dios y compartimos valores de fe.
Dichos valores y nuestro discipulado en Cristo nos unen y nos permiten ver más allá de nuestras diferencias, aun cuando se manifiestan de maneras distintas. Estas mismas fuerzas nos permiten enfocarnos en conformar la familia de Dios; una familia que construye relaciones auténticas y construye comunidad al abrazar, respetar y amar a cada uno/a de sus miembros, sin importar su trasfondo.
El mero reconocimiento o el tolerar la existencia mutua no es suficiente. Debe ocurrir la sanación y la reconciliación porque Cristo nos llama a amar a nuestro prójimo, ¡con todas sus ramificaciones! Entonces: ¿cómo empezamos?
En primer lugar y, antes que nada, busquemos a Dios y estemos abiertos/as a la guía de Dios. Luego, debemos comprometernos a largo plazo con la realización de una mayor parte de la visión en Apocalipsis 7.9. Debemos ser realistas en cuanto a lo que un compromiso con esta travesía implica y saber que el cambio no ocurre rápidamente. Además, debemos reconocer que habrá desafíos en la construcción de un cuerpo íntegro de Cristo, así podremos estar preparados/as para atravesarlos en amor.
En segundo lugar, ¡escuchar, escuchar, escucharnos unos/as a otros/as y respetarnos unos/as a otros/as! Aunque compartamos los mismos aspectos de creer en Cristo y de “ser Hermanos” que trascienden nuestras divisiones, en última instancia debemos transformar nuestra visión del mundo para ver a otros/as como Jesús nos ve a todos/as, creciendo en la similitud de Cristo, adquiriendo mayor conciencia de nosotros/as mismos/as y aprendiendo más acerca de otras personas de diferentes culturas raciales/étnicas. Construimos nuestra diversidad construyendo relaciones interpersonales más profundas y más auténticas. La flexibilidad y la adaptabilidad son conceptos claves para la construcción de lazos. Debemos tener cuidado de no suponer o juzgar a quienes son diferentes a nosotros/as. La disponibilidad de expandir nuestra identidad de Hermanos para “hacer iglesia” de una manera diferente a la que hicimos siempre puede ayudarnos a mantener como objetivo una visión más amplia del llamado que hace Cristo. Llevar a la práctica el “llamado de Cristo a la unidad” a través de la familia intercultural de Dios exigirá que como denominación seamos intencionales, inclusivos/as y comprometidos/as con la transformación y la sanación.
Estudio del trasfondo, proceso y primeras conclusiones
La labor de este comité de estudio comenzó con la adopción de dos cuestionarios y cinco tareas en la Conferencia anual 2004 en Charleston, West Virginia. De las cinco tareas originales asignadas al comité, dos aún estaban inconclusas al momento de nuestro informe a la Conferencia anual 2006 en Des Moines, Iowa. Las mismas son:
- Recomendar acciones que debemos realizar (como denominación) para acercarnos a la conformidad con la visión de Apocalipsis 7.9.
- Formular un mecanismo para informar el avance del ministerio intercultural a la Conferencia anual hasta el año 2010.
Mientras trabajamos en las tareas que nos fueron asignadas, nos dimos cuenta que muchas personas se sentían atraídas a nuestra denominación por nuestros valores centrales. Para mayor claridad en este asunto, el sitio web de la Iglesia de los Hermanos afirma: “Seguir con fidelidad a Jesucristo y la obediencia a la voluntad de Dios según se revela en las Escrituras, nos ha llevado a enfatizar los principios que creemos que son centrales para un discipulado verdadero. Entre los mismos se encuentran: la paz y la reconciliación, la vida simple, la honestidad e integridad al hablar, los valores de la familia y el servicio al prójimo en la proximidad y en la lejanía”. En reiteradas conversaciones con miembros de la iglesia pertenecientes a mayorías y minorías raciales y étnicas, casi todas aquellas personas que llegaron a la iglesia provenientes de fuera de la denominación citaron tres razones principales que les atrajeron a la Iglesia de los Hermanos: nuestro testimonio de paz, el servicio a los/as demás y la comunidad.
Además, intentamos explorar la demografía relacionada con las diversas minorías raciales/étnicas dentro de nuestra conformación denominacional y congregacional para comprender nuestra diversidad actual. Al hacerlo, encontramos que existe una carencia severa de información confiable y útil referida a lo étnico, lo racial u otros elementos culturales dentro de la Iglesia de los Hermanos. La única herramienta de recolección centralizada de información es el Formulario de Informe Estadístico Congregacional de tres páginas que cada otoño las oficinas de distrito envían a las congregaciones.
Hasta donde sabemos, la Oficina del Ministerio y el personal de Brethren Press que trabajan en el anuario comparten esta herramienta para recolectar información demográfica de las congregaciones y el cuerpo pastoral. El formulario contiene realmente pocos indicadores de diversidad cultural, y aquellos que aparecen sólo se relacionan con los/as pastores/as de la denominación. Por lo general, la diversidad cultural dentro de las congregaciones deberá ser interpretada por quien responde en vez de por el uso de definiciones estandarizadas de etnicidad, raza u otras formas de diversidad cultural. El índice de respuestas es pobre.
Por ende, no existen estadísticas demográficas confiables para proveer una “fotografía instantánea” vigente de quién es la Iglesia de los Hermanos en los Estados Unidos y Puerto Rico.
Por último, revisamos los documentos y las recomendaciones de las Conferencias anuales (1989, 1991, 1994) y las resoluciones de la Conferencia anual (2001) relacionadas con el interculturalismo (por favor, ver el informe interino a la Conferencia anual 2006 para ver detalles). Examinamos el estado de la implementación de estas recomendaciones. Dicho ejercicio suscitó lo siguiente:
– Gran admiración por la profunda reflexión teológica, integridad cristiana y la nobleza idealista de los objetivos, ideales y resultados esperados de estos documentos.
– Una sensación de que nuestro comité recibió el encargo de “reinventar la rueda”.
– Consternación, ya que, dadas todas las resoluciones y recomendaciones, ha habido pocas aplicaciones o resultados.
Concluimos que la aplicación de las recomendaciones y la falta de resultados fueron consecuencia de lo siguiente:
- Una falta de voluntad para implementar las recomendaciones, conduciendo a una mayor reticencia a dedicar financiamiento a la implementación de las recomendaciones.
- La falta de un proceso formal para evaluar el progreso de la implementación de las recomendaciones.
- La falta de una rendición de cuentas designada de antemano para el monitoreo del logro denominacional de los resultados.
- El fracaso de la implementación, la evaluación de resultados y la responsabilidad del seguimiento (que fue el resultado de que hubiera pocos defensores de la causa y ningún cambio estructural real dentro de la denominación para facilitarlo).
En todos los niveles de la Iglesia de los Hermanos se advierten estos asuntos. Hoy en día, parece haber una cuidadosa voluntad de buscar financiamiento para los esfuerzos interculturales, una disposición de considerar ciertos cambios estructurales y más defensores de la causa. Para reiterar: como comité, reconocemos que avanzar hacia el interculturalismo en nuestra denominación no podrá suceder de la noche a la mañana, sino que requiere intencionalidad, compromiso y prioridad, resultando en un giro fundamental para el modo en que “hacemos iglesia”.
Como denominación, la Iglesia de los Hermanos ha dado algunos pasos en dirección a la diversidad ilustrada en Apocalipsis 7.9: por ejemplo, abrir iglesias para grupos idiomáticos separados. Mientras que esta estrategia de plantación de “iglesias idiomáticas” es un paso hacia la realización de la visión de Cristo, ¡no debemos detenernos allí! La visión es llegar a estar SEPARADOS/AS: NUNCA MÁS, lo cual significa que todos/as adoramos juntos/as. Más allá de eso, la Iglesia de los Hermanos se involucró en labor misional en otros países, lo cual tuvo como consecuencia, en algunos de ellos, denominaciones separadas. ¿Será que el llamado de Dios de estar “SEPARADOS/AS NUNCA MÁS se refiere también a nuestros hermanos y hermanas en otros países? Una sugerencia que hemos recibido, que exige más oración y exploración, es establecer una Iglesia de los Hermanos global, que podría ayudar a unirnos aún más. Siendo comité, Dios nos ha guiado a recomendar acciones específicas que como Iglesia de los Hermanos podemos realizar en todos los niveles de nuestra denominación, de manera que juntos/as podamos realizar más de la visión de Apocalipsis 7.9 y experimentar a Dios con mayor plenitud.
Fundamentos para el avance intercultural
En la literatura sobre el interculturalismo y entre las denominaciones que han avanzado hacia el mismo, surgen muchas ideas en común. Si bien no son específicas, son fundacionales y conforman los cimientos necesarios para sustentar los esfuerzos interculturales y propiciar que los mismos lleguen a dar frutos.
En las palabras de New Life Ministries’ Diversity Project Findings (Descubrimientos del proyecto Diversidad de ministerios de vida nueva) escrito por los menonitas Rocky Kidd y Alan Rowe (ver la lista de recursos), la Iglesia de los Hermanos, como denominación, necesita comprometerse con lo siguiente:
- Escuchar la guía del Espíritu Santo.
- Ser intencionales en cuanto al interculturalismo en nuestras congregaciones y denominación.
- Tomar un compromiso de trabajar en la reconciliación racial y “decir la verdad con amor” respecto a los asuntos étnicos, raciales y de clase, de modo que ello conduzca hacia la sanación y la integridad.
- Convocar y abrazar al personal pastoral multicultural, tomándolo como importante.
- Comprometernos con estilos de adoración y música culturalmente apropiados.
- Cuando sea posible, involucrarnos en un vecindario multiétnico, invirtiendo allí nuestra emocionalidad, nuestra espiritualidad, nuestra economía, y nuestra energía física.
- Comprometernos a largo plazo con un ministerio y una comunidad en ese vecindario, y “caminar junto a” nuestros/as vecinos y vecinas.
- Evitar la actitud de “sólo arreglarlo”.
- Respetar a las personas que pertenecen a la comunidad. Permitir que la comunidad nos acepte y acepten al ministerio en sus términos, no en los nuestros. Son nuestros/as compañeros/as; no son nuestro proyecto de misión.
- Ser conscientes de que una cultura étnica individual [de la Iglesia de los Hermanos] puede opacar al evangelio y a nuestros esfuerzos de evangelización si no somos sumamente cuidadosos/as.
Recomendaciones específicas
1ra tarea: Recomendar acciones que debemos realizar para acercarnos (como denominación) a la conformidad con la visión de Apocalipsis 7.9.
2da tarea: Formular un mecanismo para informar el avance del ministerio intercultural a la Conferencia anual en el transcurso del tiempo hasta el año 2010.
Recomendaciones para la denominación
Al prepararnos para celebrar el tricentésimo aniversario de la Iglesia de los Hermanos, convocamos a todos/as nuestros/as hermanos y hermanas a volver a comprometerse con el discipulado radical que abraza nuestro tradicional testimonio de paz, simplicidad, compasión y mayordomía de la creación de Dios. Agradecemos a los odres (Mateo 9.17) antiguos que albergaron con fidelidad el testimonio viviente de Cristo en nuestro mundo. Pero en el espíritu de transformación que se encuentra en Romanos 12.2, es momento de crear nuevos odres para el futuro de la Iglesia de los Hermanos. Por lo tanto, recomendamos que la denominación amplíe la relevancia de nuestro testimonio para “todas naciones y tribus y pueblos y lenguas” adoptando el pasaje en Apocalipsis 7.9 como nuestra visión denominacional para el resto del siglo 21. De este modo, podemos articular con claridad ante nosotros/as mismos/as, nuestras amistades y aquellos/a que no pertenecen a ninguna iglesia, que desde hoy y en adelante nos caracteriza la frase SEPARADOS/AS: NUNCA MÁS.
Además, recomendamos a la Conferencia anual y a las agencias que responden a la misma:
- Incluir el concepto de la inclusión intercultural intencional en su declaración de visión/propósito.
- Establecer un proceso de discernimiento durante la contratación que considere la competencia intercultural del/de la postulante y las necesidades de la denominación.
- Exigir capacitación/educación intercultural anual para el personal y voluntarios/as de programas.
- Desarrollar programas que incluyan y acompañen con mentores/as de manera formal a adultos/as jóvenes de todos los trasfondos raciales/étnicos para tomar cargos de liderazgo, para la estabilidad y el crecimiento futuros de la iglesia.
- Actualizar el Formulario de Informe Estadístico Congregacional, de modo que incluya indicadores culturales estandarizados para mejorar la información recolectada y que la misma pueda brindar un “censo” acertado de la Iglesia de los Hermanos.
- La Conferencia anual y todas las conferencias nacionales de sus agencias reportables (NYC, NOAC, YAC y NYAC, CCS, etc. por sus siglas en inglés) incluirán intencionalmente temas y oradores/as diversos/as, ofrecerán actividades y capacitación de consciencia intercultural, y proveerán servicios adecuados de traducción.
- Proveer materiales para nuevos/as miembros, materiales de evangelización, y materiales de educación cristiana que sean interculturales y estén traducidos a los idiomas apropiados.
- Exigir que todos/as los/as miembros nuevos/as del Comité permanente de la Conferencia anual pertenecientes al comité de nominación hayan asistido a por lo menos un (1) evento intercultural (por ejemplo: Cross Cultural Consultation and Celebration [Consultoría y celebración transcultural], campamentos laborales), en los últimos cinco (5) años.
- Exigir que todos/as los/as nuevos/as nominados/as en general para la Junta de directores de las agencias hayan asistido a al menos un (1) evento intercultural (por ejemplo: Cross Cultural Consultation and Celebration [Consultoría y celebración transcultural], campamentos laborales), en los últimos cinco (5) años.
Recomendamos las siguientes acciones para Bethany Theological Seminary:
- Convertir en prioridad la plantación intercultural de iglesias y la educación intercultural.
- Plantear una política de reclutamiento intencional de personas de color entre sus estudiantes.
- Buscar personal docente calificado/a de diferentes trasfondos nacionales y étnicos.
- Incluir en su currículo el estudio de la historia y herencia religiosas de miembros no blancos/as de la iglesia, junto a la comunicación intercultural.
En cuanto a estructura, recomendamos que dentro de los Equipos de Vida Congregacional se establezca un cargo financiado de tiempo completo de un/a especialista que realice las siguientes tareas:
- Asistir la facilitación de la actividad intercultural dentro de la denominación.
- Servir como una oficina de información para los recursos interculturales.
- Asistir en la recolección de información sobre la actividad intercultural.
- Recopilar los informes anuales de avance intercultural para incluirse en el informe que realiza Ministerios de Vida Congregacional a la Conferencia anual tomando del Formulario de Solicitud de Estadísticas Congregacionales actualizado. (Ver el Apéndice N°1: Borrador de Descripción de cargo propuesto para más detalles.)
Recomendamos que, como denominación, renovemos nuestro compromiso con ubicaciones nuevas y existentes de ministerio urbano y que trabajemos de manera intencional para la plantación de nuevas congregaciones interculturales.
Recomendamos que la responsabilidad del monitoreo de la implementación de estas recomendaciones sea del Comité Permanente de la Conferencia Anual. La Conferencia Anual y sus agencias informarán su avance aplicable en la Conferencia anual cada año hasta el 2010, y cada dos años después de eso.
Recomendaciones para los distritos
Recomendamos las siguientes acciones para los distritos:
- Desarrollar e implementar estrategias para la realización de la visión de Apocalipsis 7.9 en el distrito.
- Exigir que todos/as los/as pastores/as realicen educación contínua enfocada en la actividad intercultural. (Esto se puede lograr con la realización de talleres antes o después de la conferencia para pastores/as, capacitación en línea, sesiones de capacitación o retiros para pastores/as dedicados/as, etc. Dichas actividades podrían aportar crédito para las unidades de educación continua (CEUs por sus siglas en inglés).
- Exigir CEUs de contenido intercultural para la renovación de la ordenación y de la licencia.
- Exigir que todo el personal del distrito y los/as voluntarios/as de programas reciban capacitación y experiencia intercultural.
- Implementar un programa formal de mentores para nuevos/as pastores/as minoritarios/as.
- Exigir que todos/as los/as nuevos/as aspirantes ejecutivos/as y nuevos/as nominados/as para la Junta de Distrito, comités y sus representantes en el Comité permanente y en la Junta General deben haber asistido a un (1) evento intercultural (por ejemplo: Cross Cultural Consultation and Celebration [Consultoría y celebración transcultural], campamentos laborales), en los últimos cinco (5) años.
Recomendamos que cada Junta de Distrito sea responsable de la implementación de las recomendaciones anteriormente mencionadas, informando del progreso del distrito en actividad intercultural al final de dos años, en su Conferencia de Distrito, y cada dos años en adelante, con el envío de informes de progreso a la Junta General.
Recomendamos que cada distrito implemente y promueva un evento anual que enfatice la bendición de la creciente naturaleza intercultural de nuestra familia de la Iglesia de los Hermanos, y de nuestra necesidad de acercarnos aún más a la visión de Apocalipsis 7.9.
Recomendamos que los distritos sean intencionales en cuanto a la recolección de estadísticas pastorales y congregacionales, usando el Formulario de Informe Estadístico Congregacional, el cual se actualizará para incluir indicadores de diversidad.
Recomendaciones para las congregaciones
Luego de numerosas conversaciones, estudios de casos, lecturas, etc., que los/as miembros de nuestro comité realizaron, los principios destacados de las iglesias que avanzan hacia convertirse en una familia de Dios intercultural incluyen: liderazgo, intencionalidad, adaptabilidad y adoración integrada. En los apéndices se encuentra el documento denominado: “Stages of Intercultural Church Development” (Las etapas del desarrollo de la iglesia intercultural) (junto a principios claves, estudios de casos reales y recursos), que pueden ser una guía benéfica para congregaciones que desean hacerse más interculturales.
Recomendamos las siguientes acciones para las congregaciones:
- Extenderse intencionalmente hacia personas de diferentes trasfondos en su vecindario y amarlos/as como vecinos/as, construyendo con ellos/as relaciones auténticas.
- Informarse sobre las condiciones de vida de las minorías étnicas y raciales en sus vecindarios y sus congregaciones, de manera que cuando se revelen las desigualdades, puedan hacer fuertes compromisos de tiempo y recursos económicos para con organizaciones locales que trabajen en estos asuntos.
Recomendaciones individuales
Recomendamos las siguientes acciones para individuos:
- Que miembros individuales y familias de la Iglesia de los Hermanos presenten intencionalidad respecto a formar relaciones auténticas con vecinos/as diversos/as, aprendiendo sobre sus trasfondos culturales e historias personales, y aprendiendo más sobre cómo experimentan y ven a Dios.
- Que miembros individuales y familias de la Iglesia de los Hermanos se informen mejor respecto al racismo y otros tipos de discriminación, y que se unan solidariamente a víctimas de todos los crímenes del odio, ofreciéndoles compasión y asistencia.
- Que estudiantes, personal y docentes de instituciones de enseñanza superior de los Hermanos continúen su compromiso de abrirse a personas de todos los trasfondos raciales y étnicos, y busquen construir relaciones con personas provenientes de instituciones de enseñanza superior tradicionalmente étnicas ubicadas en su cercanía.
- Que los/as residentes de los Hermanos y personal de las comunidades de los Hermanos para personas de la tercera edad continúen su apertura a personas de todos los trasfondos raciales y étnicos, y busquen construir relaciones con instituciones tradicionalmente étnicas cerca suyo.
Conclusión
¿Cómo podemos experimentar a Dios con mayor plenitud? ¿Qué significa verdaderamente ser la familia de Dios? ¿Qué significa ser verdaderamente uno en Cristo? ¿Qué evita que concretemos la visión de Apocalipsis 7.9? ¿Qué necesitamos hacer para lograr la realización de esta visión?
Estas son las preguntas con las que, como equipo intercultural, hemos trabajado arduamente y que hemos presentado en oración durante los últimos tres años. Hemos buscado la guía de Dios al trabajar juntos/as para responderlas y completar las tareas que nos fueron asignadas. Lo que encontramos es que Dios nos ha guiado a cada uno/a en una travesía asombrosa. Hemos oído el llamado de Dios a una transformación completa de cada uno/a de nosotros/as, de nuestras iglesias y de nuestra denominación.
Esta es una súplica por la transformación; un llamado a cada uno/a de nosotros/as de seguir más plena y completamente el ejemplo de Cristo del amor a todas las personas y todos los pueblos: al amar a nuestros/as vecinos/as. A través del amor de Cristo, nos convertimos en la familia de Dios realmente inclusiva visualizada en Apocalipsis 7.9.
Para lograr esto, debemos estar completamente abiertos/as a la obra de Dios en nosotros/as y entre nosotros/as. Al abrirnos verdaderamente a Dios, no hay límites a lo que Dios puede lograr. Así fue en la iglesia que se describe en el segundo capítulo de Hechos. Así fue en nuestras raíces en Schwarzenau, Alemania. Comenzamos como cristianos que nos permitimos ser transformados/as.
Hoy, Dios nos está llamando a experimentar una transformación para convertirnos en un cuerpo íntegro de Cristo, de manera que no estemos SEPARADOS/AS NUNCA MÁS. Así que este no es sólo un escrito que contiene recomendaciones. Es un llamado a la transformación. Sin transformación, no puede haber una implementación eficaz de las recomendaciones. Pues como dice el pasaje en Mateo 9.17, “Ni echan vino nuevo en odres viejos; de otra manera lo odres se rompen, y el vino se derrama, y los odres nuevos se pierden; pero echan el vino nuevo en odres nuevos, y lo uno y lo otro se conservan juntamente”.
Hermanas y hermanos: este es un llamado al uso de odres nuevos; de transformación total a través de la apertura a la guía de Dios. Esta es la única manera de realizar más de la visión en Apocalipsis 7.9. En esta transformación y en el avance hacia esta visión para la iglesia, somos llamados a la reconciliación, y Dios puede usar este mensaje y ministerio de reconciliación para transformar y sanar literalmente nuestra sociedad y el mundo. Respetuosamente y en oración, presenta esta declaración el Comité de Estudio Intercultural:
Asha Solanky, presidenta
Darla Kay Bowman Deardorff
Thomas M. Dowdy
Nadine L. Monn, secretaria
Neemita Pandya
Gilbert Romero
Glenn Hatfield, ex-officio, American Baptist Churches USA
Acción de la Conferencia anual 2007: La Conferencia anual 2007 aprobó el informe del Comité de Estudio Intercultural.
1° apéndice: Borrador de la descripción del cargo propuesto
Este cargo en el Equipo de Vida Congregacional incluye un elemento de especialidad y por la cualidad de su función, se trata de un cargo muy colaborativo. Rango del salario: $ 40,000 – 42,000
Descripción del cargo:
Este/a empleado/a del personal se responsabilizará por las obligaciones de los/as miembros del Equipo de Vida Congregacional, pero en su cartera se incluirían competencias funcionales en áreas de recolección y análisis de demografía cultural, incluyendo, pero no limitado a raza, etnicidad y género. Además, esta persona se ocuparía de recolectar, monitorear y analizar los esfuerzos y ministerio intercultural que suceda dentro de la denominación y de hacer recomendaciones donde y cuando corresponda. Adicionalmente, dicho individuo, realizaría la recopilación y redacción de la información sobre estas actividades para incluirse en el Informe anual que se presenta a la Conferencia anual.
Nota: La persona que se desempeña en este cargo no será responsable de prescribir o dirigir la actividad intercultural dentro de la denominación. Más bien, la persona que ejerce este cargo servirá de conductor de información y de intermediario para conectar a personas con necesidades específicas relacionadas con el ministerio y la actividad intercultural con expertos/as conocidos/as y otros recursos disponibles dentro de la denominación.
Informar al/la directora/a de Ministerios de Vida Congregacional
Los siguientes criterios se tomarán en consideración para el discernimiento del/la postulante apropiado/a:
Experiencia pastoral (cinco años) o servicio equivalente
Competencia intercultural bilingüe demostrado
Bilingüe: con fluidez oral y escrita
Capacidad demostrada de comunicar y trabajar en red efectivamente con personas de una variedad de etnicidades, razas y culturas
Pericia en recolección de datos, análisis y elaboración de informes
Persona perteneciente a una minoría
Sus responsabilidades incluyen, pero no se limitan a las siguientes:
Con actitud activa, recolectar información y recopilar información sobre la actividad y ministerio intercultural dentro de la denominación (a través de contactos rutinarios con otros/as miembros del Equipo de Vida Congregacional y por su propia iniciativa)
Servir de referente para conectar a personas con necesidades con personas idóneas para las diversas actividades interculturales: establecer contactos, programar reuniones.
Encontrar y conectarse con traductores/as para varios eventos denominacionales. Involucrar a juveniles y adultos jóvenes (juveniles y adultos jóvenes bajo CLM).
Recopilar información sobre las estadísticas de minoridades dentro de la denominación disponibles, con aportes de la Oficina del Ministerio y la Oficina del Anuario (Yearbook Office).
Redactar un informe por escrito que se incluirá en el informe anual a la Conferencia anual que incluya una actualización de las actividades interculturales dentro de la denominación.
2do apéndice: Etapas del desarrollo de la iglesia intercultural
Las congregaciones pueden encontrarse en cualquier lugar de este continuo (incluso entre etapas); pueden moverse hacia atrás en el continuo antes de volver a avanzar…
- Monocultura cerrada: La iglesia se compone de personas pertenecientes a un sólo grupo étnico y los/as miembros no presentan apertura a personas de otras culturas.
- Monocultura abierta: En su mayoría, la iglesia se compone de personas pertenecientes a un solo grupo étnico, pero ellas presentan apertura a personas de otras culturas, siempre que las mismas con el tiempo, puedan ser “como nosotros/as”.
- Predominantemente monocultural: En su mayoría, la iglesia se compone de personas pertenecientes a un solo grupo étnico, pero ellas reciben abiertamente a personas de otras culturas y son conscientes/toleran cierta diferencia cultural.
- Cultura mixta: La iglesia se compone de personas pertenecientes a dos grupos étnicos o más y recibe abiertamente y acepta a quienes proceden de otras culturas; un grupo cultural aún es dominante; posee cierto liderazgo situado que guía el avance de la visión.
- Parcialmente integrada: La iglesia se compone de personas pertenecientes a dos grupos étnicos o más. Recibe abiertamente a personas de culturas diferentes y se adapta para ellas, desde el uso de elementos visuales, la música, la adoración. Posee un liderazgo fuerte situado que guía el avance de la visión.
- Plenamente integrada: Ninguna cultura o grupo étnico es dominante, el liderazgo se comparte entre personas de diferentes trasfondos culturales; la iglesia ha creado una cultura “nueva”, que se mueve con fluidez entre los diferentes trasfondos culturales; los/as miembros pueden ver desde la perspectiva de Cristo (no a través del lente de su propia cultura); un liderazgo fuerte continúa guiando el avance de la visión de Apocalipsis 7.9…
Desarrollado por la Dra. Darla K. Deardorff, Durham, Carolina del norte, 2007
3er Apéndice: Los principios para el cultivo de iglesias multiculturales
El proyecto de diversidad:
Historias y aprendizajes prácticos sobre los orígenes de las iglesias urbanas multiculturales
Escrito por Rocky Kidd y Allan Howe
A 1. Construir convicción sobre la diversidad
Bíblicamente: las personas deben saber por qué, desde la Biblia, debemos tener iglesias multiculturales. Ver: Ap 7.9-12; Hch 6.1-17, 11.19-26, 12.1-3; Mt 28.19-20; Ef 2.14-22; Gá 3.26-28.
Estratégicamente: la realidad urbana es multicultural y la iglesia no debe quedarse atrás de la diversidad del mundo, sino al contrario, demostrar al mundo un modelo saludable de unidad en la diversidad en Cristo.
2. Afirmar la diversidad como parte de la identidad y visión de la iglesia.
A través de sermones/mensajes: El/la pastor/a debe hablar de ello con frecuencia en sus predicaciones.
A través de la planificación: por lo general, la diversidad no es algo que sucede; debe existir una intencionalidad en nuestros planes de crecer como iglesia diversa.
A través de la adoración, la extensión y los ministerios: la adoración deberá enriquecerse con elementos de culturas diversas, y los ministerios deberán desarrollarse o redefinirse para ser sensibles a los asuntos de culturas diversas.
3. Construir un equipo de liderazgo y personal multicultural
Pedir la dirección de Dios para encontrar a las personas de otras culturas que Dios conoce con quien puedan crecer y servir.
Buscar aquellas personas, presentándoles el desafío de su visión y su participación en la misma. Tómenlas como discípulos/as para capacitarlas de modo que puedan crecer y servir juntos/as.
4. Disfrutar del avance y anticiparse a los problemas
Celebrar la diversidad: ¡Es un anticipo del cielo en el que podemos deleitarnos aquí y ahora!
Evaluar las dinámicas: estar atentos a cómo las personas están interactuando en niveles más profundos.
Aprender a identificar las señales de precaución: facciones, cuestiones de fondo y “desapariciones misteriosas”.
Facilitar la comunicación: una necesidad constante de no sólo resolver problemas sino maximizar la intención que Dios tiene para la diversidad.
5. Seguir creciendo y plantar iglesias multiculturales nuevas
Reconocer cómo las dinámicas de una iglesia multicultural afectan los asuntos ya complejos de la integración, la movilización y la obligación.
Afirmar tu visión de iglesias multiculturales convocando a un equipo multicultural de tu iglesia para salir a iniciar otra iglesia multicultural.
Preparado por Rdo. Thomas M. Maluga, pastor superior, Uptown Baptist Church, Chicago, Illinois
4to apéndice: estudio de caso de First Church of the Brethren de Harrisburg
Presentan:
Pastora Marisel Olivencia
Pastor Irvin Heishman
Información de trasfondo:
Declaración de la visión (afirmada por la congregación en 1995): “Somos llamados/as a construir una comunidad multicultural centrada en Cristo en la zona céntrica de la ciudad, compartiendo el amor, la sanación, la paz y la justicia de Cristo”.
Información del vecindario y de la iglesia:
En 1996, First Church celebró su aniversario centenario. La iglesia fue fundada por Hermanos alemanes rurales que se mudaban a la ciudad por motivos laborales. La ciudad era mucho más pequeña en ese momento, de manera que la iglesia, de hecho, se ubicada en los márgenes de la ciudad. En ese tiempo, el vecindario de la iglesia consistía de personas pertenecientes a la clase obrera blanca.
Para la década de 1950, la ciudad había crecido a tal punto que First Church se situaba claramente en el centro de la ciudad. Se desarrolló una crisis importante en la iglesia cuando el vecindario comenzó a cambiar radicalmente con la llegada de una variedad de minorías étnicas y las enardecidas tensiones raciales. Hubo una sensación fuerte entre muchas personas de la iglesia de que la misma debiera reubicarse en los suburbios, como lo estaban haciendo muchos/as de sus miembros. Sin embargo, el pastor profético de la congregación ayudó a apoyar a quienes se sintieron llamados/as a permanecer en la comunidad para servir a los grupos nuevos de personas que se estaban mudando al vecindario. Al final, la congregación decidió asistir el desarrollo de una nueva plantación de iglesia en los suburbios, que conformó a Ridgeway Community Church. Al mismo tiempo, quienes decidieron permanecer con la congregación asumieron un proyecto de construcción importante y agregaron personal para poder lanzar nuevos y amplificados programas comunitarios de extensión.
La extensión comunitaria de la iglesia ha permanecido fuerte a lo largo de los años. Sin embargo, el foco de la visión que se formó en la década de 1960 estaba puesto principalmente en el servicio, con poco énfasis en la evangelización. Como resultado, la congregación atrajo a una membresía maravillosa y singular, pero en su mayoría blanca, con un alto porcentaje de ex trabajadores de servicio voluntario. Además, la congregación ha sufrido por la paulatina disminución de la membresía y asistencia, a lo largo de varias décadas.
Este patrón de declinación está comenzando a modificarse dramáticamente. El liderazgo actual ha estado enfatizando la importancia de equilibrar el servicio con la evangelización. El esfuerzo evangelístico de agregar una reunión de adoración en español ha sido el más efectivo hasta la fecha.
Estadísticas de asistencia:
Luego de décadas de padecer una disminución gradual, la asistencia promedio a la adoración en First Church se incrementó en un 62% en sólo dos años. Sumado a este incremento, nuestro grupo latino de adoración desarrolló una relación con una nueva plantación de iglesia (con una asistencia promedio de 75) en Belén, Pensilvania, la cual desea ahora afiliarse a la Iglesia de los Hermanos. Actualmente, ¡estamos en el proceso ser “adoptados/as” como iglesia madre de esta nueva comunidad! Si contamos el grupo de Belén, el índice de crecimiento en dos años sería de 122%.
Resumen de estadísticas:
Año | Asistencia promedio |
1985 | 157 |
1997 | 127* |
1999 | 193 |
Enero 2000 | 206** y ¡continúa creciendo! |
* Este número bajo no incluye la asistencia a la reunión de adoración vespertina del día sábado, un primer intento de iniciar una segunda reunión de adoración. Dicho esfuerzo no prosperó, y fue descontinuado. Desafortunadamente, la mayoría de las personas que sí asistían a esta reunión vespertina ya no nos acompañan. Sin embargo, lo aprendido de esta experiencia contribuyó al éxito de los esfuerzos actuales.
** El promedio de este mes no incluye un domingo de clima invernal en que ambas reuniones tuvieron una asistencia baja muy poco habitual.
El período de declinación entre 1985 y 1997 refleja un patrón que en realidad se extiende en la historia por varias décadas. Una parte significativa de esta declinación se debía al envejecimiento de la congregación.
Hubo 12 fallecimientos durante uno de esos años. La pérdida de un número significativo de miembros por fallecimiento continuará drenando la fortaleza de la membresía de la congregación durante un tiempo más.
De todos modos, en el período de dos años que finaliza en diciembre de 1999, la asistencia promedio a la adoración se había incrementado dramáticamente a 193, debido en gran parte al agregado de la reunión de adoración en idioma español. La mayoría de los/as nuevos/as asistentes se convirtieron en nuevos/as creyentes. Algunos/as de los nuevos/as asistentes a la reunión matinal en idioma inglés se sintieron atraídos/as por la iglesia, impresionados/as por el alcance de la iglesia a la comunidad latina, ¡aun siendo que ellos/as mismos/as no hablaban el español! El 30 de enero del año 2000, la asistencia a la reunión de adoración en español fue de 107 personas, superando el número 100 por primera vez. Tal vez, en algún momento de este año la asistencia a la reunión en idioma español supere la de la reunión matinal.
Nuestra historia de compartir el edificio:
First Church posee una historia larga y exitosa de compartir su edificio con grupos comunitarios y otros grupos de adoración. Actualmente, la congregación comparte su edificio con una comunidad de Camboya afiliada con la Evangelical Free Church (Iglesia Libre Evangélica). Dicho grupo ha usado nuestro edificio sin cargo durante 15 años (la comunidad está contribuyendo con nuestra campaña de construcción).
En el pasado, la iglesia compartió sus instalaciones con la Hispanic Mennonite Church cuando estaba en sus inicios. Esta congregación ya posee sus propias instalaciones y se ubica en otra parte de la ciudad. Nuestro grupo latino y los/as menonitas realizan reuniones de adoración conjuntas y disfrutan de una relación positiva y de apoyo mutuo.
Ministerios comunitarios:
Brethren Housing Association ya tiene 10 años de edad. Este ministerio incorporado de manera separada ha comprado y renovado seis propiedades (en la misma calle que First Church), con un total de dieciséis unidades de vivienda. Las mismas se usan para brindar alojamiento de transición para familias sin hogar. Además, se proveen servicios de manejo de casos en cooperación con una organización hermana. Al día de hoy, DELTA Housing Inc. BHA posee un presupuesto anual de $140,000 y recibe financiamiento de una red de ocho congregaciones miembros, individuos y donaciones. En First Church, los días viernes se realiza una distribución semanal de alimentos. Más de doscientas familias se acercan semanalmente para recibir alimento complementario. Este ministerio es un ministerio cooperativo con Freedom Chapel, una congregación independiente. Para equilibrar el servicio con la evangelización, se invita a las familias, de manera totalmente voluntaria, a venir más temprano para asistir a un estudio bíblico, antes de recibir su comida. La respuesta ha sido sorprendentemente positiva y varias personas han comenzado a asistir a la iglesia por este esfuerzo de extensión.
Se ofrecen varios programas para infancias, incluyendo un club de computación (a través del cual, quien completa la clase recibe una computadora gratis para llevar a su casa), KIDS Church (una reunión vespertina dinámica para infancias, ayuda escolar por la tarde y becas para niños y niñas que asistan al campamento de verano.
Además, First Church está experimentando con “ministerios de producción de ingresos” para ver si los ministerios de extensión comunitaria pueden lograr el autosustento. Un negocio de segunda mano que vende indumentaria usada y pequeños muebles opera desde el sótano de la iglesia. Este es nuestro primer experimento con este concepto. Se entrega ropa de manera gratuita a familias necesitadas. Además, First Church está tramitando el alquiler de su espacio de estacionamiento a trabajadores de la zona céntrica comercial de la ciudad.
El edificio se utiliza muchísimo por grupos comunitarios como Narcóticos Anónimos.
Estadísticas económicas:
First Church ha disfrutado de un apoyo económico sorprendentemente fuerte de parte de sus miembros. El presupuesto del año 2000 de la congregación (sustentado completamente por compromisos congregacionales y de otras fuentes de ingresos) es de $290,143. Sumado a ello, la congregación recaudó $361,000 en una campaña de mejora de capital. La reunión de adoración en español comenzó a la mitad de la campaña de capital.
Los fondos para contratar al equipo pastoral latino se reunieron a través de la preparación de un presupuesto para el ministerio incluyendo el paquete salarial. Luego, este presupuesto se proyectó en el futuro por cinco años. Después, el presupuesto total se dividió en partes (como las secciones de una torta). Se invitó a diversas congregaciones, a nuestro distrito, y a distintos grupos, a convertirse en copartícipes de financiamiento, de modo que cada uno/a cubría una sección de la torta. Durante los siguientes cinco años, se proyecta que la nueva comunidad de idioma español cubra más y más de los gastos económicos, con una proyección futura de que el grupo logre autosustentarse económicamente en seis años. Hasta el momento, se viene cumpliendo el objetivo de las proyecciones, salvo que la asistencia se ha incrementado más rápido que lo esperado.
Sueños para el futuro:
Durante el último año la congregación ha luchado con cuestionamientos relacionados con cómo alcanzar de manera más efectiva a nuestros/as vecinas/as que hablan inglés. Hemos aprendido a valorar el rol clave que tiene el estilo de adoración en este aspecto.
Los experimentos con la mixtura de estilos de adoración revelaron las limitaciones posibles pero frustrantes de este abordaje. Por ende, en la actualidad se está planeando desarrollar un nuevo grupo celular basado en una reunión de adoración en inglés al estilo gospel negro/contemporáneo. Al mismo tiempo, planificamos conservar la frescura y significatividad de la reunión de adoración al estilo tradicional, introduciendo de manera paulatina ciertos cambios y variedades.
Anhelamos conservar el ideal anabautista de comunidad a través de la expansión del número de reuniones de adoración conjunta, involucrando a personas de todos los grupos de adoración, del desarrollo de grupos de estudio transculturales, y del apoyo de actividades como el campamento de trabajo para jóvenes anglo/latinos/as en Puerto Rico.
5to apéndice: La travesía intercultural de Peace Covenant Church
A lo largo de la vida de Peace Covenant Church, plantada en Durham, Carolina del norte en 1994, ha existido siempre el anhelo de ser aquello que Dios deseara que la comunidad fuera. Teniendo a la Iglesia de los Hermanos más cercana a 128 km, y el grupo de miembros conformado por personas entre los 20 y 40 años de edad (la mayoría de un trasfondo de los Hermanos) situado en un contexto urbano, sabíamos que no sería un emprendimiento habitual.
Desde el comienzo supimos que el primer y principal desafío sería traducir el mensaje de los Hermanos a un contexto comprensible por una población que básicamente, nunca había oído de nosotros/as. Esto significó la expansión de nuestra identidad de Hermanos y no “hacer iglesia” del modo que los Hermanos acostumbran hacerlo. Entonces: ¿Quiénes eran nuestros/as vecinos/as? ¿En qué contexto vivían? ¿Qué necesitaban? ¿Dónde podía encajar el mensaje anabautista en esta parte de Carolina del norte? De modo que empezamos a observar a nuestra comunidad circundante y notamos que la comunidad ¡es realmente muy diversa! Las personas de todo el mundo se sienten atraídas a este lugar por nuestras tres universidades importantes: (Duke, NC State y UNC-Chapel Hill) y las corporaciones mundiales en Research Triangle Park. Es cierto, Durham cuenta con un 40% de población caucásica y un 40% de población africana americana, pero las comunidades crecientes hispanas, indias, asiáticas y africanas están todas incrementando su número con un índice asombroso. No pasó mucho tiempo hasta que tomamos consciencia de que los y las caucásicos/as, éramos una minoría en nuestra comunidad, y nos preguntamos por qué nuestra iglesia no representaba esa demografía.
Entonces, comenzamos a preguntarnos, no sólo: ¿qué necesitaban nuestros/as vecinos/as de nosotros/as? Sino: ¿qué necesitábamos nosotros/as de nuestros/as vecinos/as? ¿Qué dones, talentos, tradiciones, pasiones y fortalezas espirituales tenían las personas a nuestro alrededor que podían fortalecernos como cuerpo? Eso nos ayudó a darle un giro a nuestro ministerio. Ya no estábamos buscando a pobres y marginados/as y personas que sufrieron injusticias para poder darles algo, sino que estábamos mirando a las personas que nos rodeaban y anhelábamos conformar una comunidad con ellos/as y aprender de ellos/as y adorar juntos/as a Dios.
De igual manera, en primer lugar, nos dimos cuenta de que nuestros/as miembros necesitaban sentirse más cómodos/as con las diferencias culturales. A través de la oración y el estudio, concluimos que necesitábamos extendernos intencionalmente para alcanzar a personas de la comunidad internacional.
Así que: ¿cómo realizamos esa extensión? De diversas maneras, realizando celebraciones de diversidad racial y cultural.
1) Comenzamos a realizar eventos IFFF el primer sábado de cada mes por la tarde. IFFF, por sus siglas en inglés, significa: películas, amistad y comida internacional “International Food, Friends, and Film” (¡Sabemos cómo les gusta comer a los Hermanos!), y se refiere a una comida internacional a la canasta seguida de una película extranjera (a menudo en otro idioma, con subtítulos). Se envían invitaciones electrónicas a las oficinas internacionales de universidades locales, vecinos/as, colegas, docentes de inglés como segundo idioma de la comunidad, entre otros/as. Estos eventos se hicieron bastante populares, con una asistencia promedio de 30 a 40 personas por evento, y por lo general, en representación de más de 10 u 11 países y 5 continentes. Además, dichos eventos se han convertido en una manera excelente para que nuestros/as miembros se sientan más cómodos/as con las diferencias culturales, con la incorporación de comidas diferentes e idiomas diferentes: todo parte de un evento social y divertido.
2) Otro evento que se comenzó a realizar fue nuestro Foro nocturno del viernes, al cual se invita a la comunidad. Estos foros, que habitualmente se llevan a cabo cada dos meses, abordan temas de interés mundiales y los/as participantes pueden conversar sobre maneras prácticas de abordar estos asuntos en sus vidas diarias.
3) Un tercer paso que tomó nuestra iglesia ha sido la adaptación de nuestra adoración, música, arte e imágenes, para representar una imagen más diversa de Dios y del cristianismo (incluyendo ritmos de diferentes culturas, banners en diferentes idiomas, carteles de bienvenida en distintos idiomas, y decoración de A Greater Gift).
Hace tres años que comenzamos nuestra travesía de diversificarnos intencionalmente para poder ser una comunidad más completa, que experimenta los numerosos rostros y las numerosas razas de Dios. Cada semana podemos agradecer a Dios por las nuevas voces, acentos, idiomas, tradiciones, música y liturgia de todo el mundo y en nuestro patio, y nos sentimos más cerca de Dios que nunca. En un domingo cualquiera, recibimos entre 30 y 35 adoradores/as de 4 a 5 países diferentes. Hemos aprendido que las personas de distintos trasfondos culturales se sienten atraídas por Peace Covenant debido a la calidez, autenticidad y amabilidad de sus miembros y por el testimonio denominacional de paz (de hecho, supimos que el Polo de Paz frente a nuestro edificio de la iglesia es el motivo que en un primer momento provocó el ingreso de varios/as de nuestros/as miembros).
Ha sido una travesía maravillosa que venimos transitando junto a Dios: llena de alegrías y dificultades. Con todo, hemos aprendido que cuando nos abrimos plenamente a la guía de Dios, ¡no existe límite para lo que Dios puede hacer entre nosotros/as! Como cualquier iglesia intercultural, existen desafíos que debemos confrontar continuamente: con la ayuda de Dios. Algunos de esos desafíos incluyen la diversificación del liderazgo, manejar el tema de múltiples idiomas, aprender juntos/as a ser una verdadera comunidad; básicamente, aprender a amar en muchos idiomas. Sin embargo, lo que nos consuela es que creemos que esta no es nuestra visión, sino la visión de Dios para la iglesia, y que él ya tiene trazado un camino hacia adelante, hacia esta visión de Apocalipsis 7.9; sólo debemos ser fieles en el discernimiento de la visión, valientes y abiertos/as a seguirlo y humildes para concretarla en nuestra vida.
6to apéndice: Lista de recursos/lectura
I. Las iglesias interculturales como expresión del principio cristiano
- Where the Nations Meet: The Church in a Multicultural World (Donde las naciones se encuentran: la iglesia en un mundo multicultural) por Stephen A. Rhodes. Intervarsity Press.
- What Color Is Your God? (¿De qué color es tu Dios?) por David Ireland. Impact Publishing House.
- Marginality: The Key to Multicultural Theology (La marginalidad: la llave a la teología multicultural) por Jung Young Lee. Fortress Press.
- United by Faith: The Multiracial Congregation as an Answer to the Problem of Race (Unidos/as por la fe: la congregación multirracial como respuesta al problema de la raza) por Curtiss Paul Deyoung, Michael Emerson, George Yancey, y Karen Chai Kim. Oxford U. Press.
- One New People: Models for Developing a Multiethnic Church (Un solo pueblo nuevo: modelos para el desarrollo de una iglesia multiétnica) por Manuel Ortiz. Intervarsity Press.
- Pursuing the Pearl (Buscar la perla) por Ken Fong. Judson Press.
- A Beginner’s Guide to Crossing Cultures: Making Friends in a Multicultural World (Una guía del cruce de culturas para principiantes: hacer amigos/as en un mundo multicultural) por Patty Lane. Intervarsity Press.
- Through the Eyes of Another: Intercultural Reading of the Bible (A través de los ojos de otro/a: la lectura intercultural de la Biblia) por Hans De Wit. Institute of Mennonite Studies.
- One Blood: The Biblical Answer to Racism (Una sola sangre: la respuesta bíblica al racismo) por Ken Ham. Master Books.
II. Hacia la comprensión de dificultades y barreras
- There Is More than One Color in the Pew (Hay más de un color en el banco de la iglesia) por Tony Mathews. Smith Helwys Publishing.
- The Wolf Shall Dwell with the Lamb: A Spirituality for Leadership in a Multicultural Community (El lobo morará con el cordero: una espiritualidad para el liderazgo en una comunidad multicultural) por Eric Law. Chalice Press.
- Divided by Faith: Evangelical Religion and the Problem of Race in America (Divididos/as por la fe: la religión evangélica y el problema de raza en América) por Michael O. Emerson y Christian Smith. Oxford U. Press.
- The Color of Faith: Building Community in a Multiracial Society (El color de la fe: construir comunidad en una sociedad multirracial) por Fumitaka Matsuoka. United Church Press.
- Many Cultures, One in Christ (Muchas culturas, uno en Cristo) por Julie Garber. Brethren Press.
- Enter the River (Entra al río) por Jody Miller Shearer.
- God Is Red (Dios es rojo) por Vine Deloria Jr.
- The Chalice and the Blade (El cáliz y la espada) por Riane Eisler.
- Embracing Diversity: Leadership in Multicultural Congregations (Abrazar la diversidad: el liderazgo en congregaciones multiculturales) por Charles Foster.
- Challenging Racism (Desafiar el racismo) por Jody Miller Shearer. Faith and Life Press.
- The Many Faces of Jesus Christ: Intercultural Christology (Los numerosos rostros de Cristo: la cristología intercultural) por Volker Kuster. Orbis Books. Por Volker Kuster.
III. Hacia convertirse en intercultural
- One Body, One Spirit: Principles of Successful Multiracial Churches (Un cuerpo, un espíritu: los principios de las iglesias multirraciales exitosas) por George A. Yancey. Intervarsity Press.
- The Bush Was Blazing but not Consumed: Developing a Multicultural Community Through Dialogue and Liturgy (La zarza ardía, pero no se consumió: desarrollar una comunidad multicultural a través del diálogo y la liturgia) por Eric Law. Chalice Press.
- Against All Odds: The Struggle of Racial Integration in Religious Organizations (Contra todas las dificultades: la lucha de la integración racial en las organizaciones religiosas) por Brad Christerson, Michael O. Emerson y Korie Edwards.
- Multicultural Ministry: Finding Your Church’s Unique Rhythm (El ministerio multicultural: encontrar el ritmo singular de tu iglesia) por David Anderson. Zondervan.
- From Every People and Nation: The Book of Revelation in Intercultural Perspective (De todo pueblo y nación: el libro de Apocalipsis en una perspectiva intercultural) por David Rhoads. Augsburg Fortress Publishers.
- A Mosaic of Believers: Diversity and Innovation in a Multiethnic Church (Un mosaico de creyentes: diversidad e innovación en una iglesia multiétnica), por Gerardo Marti.
- Uncovering Racism (Desvelar el racismo), por Kathryn Goering Reid y Stephen Breck Reid.
- People On The Way (Un pueblo en camino), por Ken Fong.
- The Blessing of Diversity (La bendición de la diversidad): enero 1999 Messenger Magazine. Incluye artículos como “Diversity at the Corner of Poplar and Main: A Call to Action on Inclusivity” (Diversidad en la esquina de Poplar y Main: un llamado a la acción por la inclusividad), por Jeanne Jacoby Smith, “Where Does Your Church Go from Here?” (¿Cómo sigue tu iglesia a partir de aquí), por
J.J. Smith, y “On Diversity, is your Church still Running like a Model A?” (En relación a la diversidad: ¿aún funciona tu iglesia como un modelo A), por J. J. Smith. - Cross-Cultural Servanthood (Servir cruzando fronteras culturales), por Duane Elmer. Intervarsity Press.
- Living on the Borders: What the Church Can Learn from Ethnic Immigrant Cultures (Vivir en los márgenes: ¿Qué puede aprender la iglesia de las culturas inmigrantes étnicas?), por Mark Griffin y Theron Walker. Brazos Press.